Llevo un diario desde que tengo memoria y para mi es una forma de “alucinar” la vida cotidiana. Además, bajar los pensamientos al papel tiene otras razones poderosas y muy recomendables para tener un diario personal:
RAZÓN NÚMERO 1: ESCUCHAR(TE)
Un diario íntimo es un espacio para ser honestos con nosotros mismos. Te ayuda a conocerte de una manera concreta y real. Es una forma distinta de escucharte y de que tus palabras se conviertan en tu propio oráculo. Para confiar en lo que sos capaz de ser, de hacer y de dar.
RAZÓN NÚMERO 2: CONECTAR CON LO QUE TE IMPORTA
Un diario íntimo remite a la adolescencia, a esos años turbulentos y aventurados en los que muchas veces te sentís perdido, temerario, desilusionado e infinito. Y en los que necesitás, casi con desesperación, entenderte. Con el tiempo, llevar un registro personal de lo que te sucede -de lo que pensás y sentís y deseás íntimamente- se convierte en un proceso maravilloso para conectar con tu propia historia y con lo que es importante para vos en tu corazón.
RAZÓN NÚMERO 3: PONERTE EN ACCIÓN
La escritura es un ‘desmaquillante’ infalible para tanta máscara. Un método que vale la pena probar para contrarrestar lo otros opinan que es correcto o cuál es la manera esperada de hacer las cosas. La escritura personal te cambia la vida: te acerca pensar y repensar esa vida que deseás… Pero no alcanza con soñarla, tenés que hacer algo al respecto. Y escribir es un gran primer paso para poder convertirlas realidad.
Te hacés compañía, construís un refugio donde guardar sensaciones e intuiciones, registrás tus brotes de inspiración, creás una bitácora de lo que vas experimentando… motivos para escribirte, sobran. Ahora te toca a vos decidir cuál es el tuyo.
